Ernesto Sevilla regresa a El Club de la Comedia para confesarnos que a sus 37 años es el único de su grupo de amigos que está soltero. Para ellos es Satanás y huyen de él cuando les dice de ir a tomar cañas, quizás porque cuando les convence acaban borrachos por la mañana en cualquier sitio.
El chanante nos cuenta en este monólogo las ventajas estar soltero y que sus amigos no pueden disfrutar. Además nos relata algunas anécdotas de su infancia y nos describe cómo han sido sus últimas parejas, a cada cual más extraña.